sábado, 4 de septiembre de 2010

América en versos




América
en versos









América
en versos






Marcos Valverde

2004






Título: América en versos.

Levantado de texto: el autor.

Corrección de estilo: Margarita Víquez

Diseño y diagramación: Uruk Editores, S.A.

Corrección final del borrador: Daisy Saborío.

Corrección de pruebas: el autor

Dirección editorial:Uruk Editores, S.A.

Dibujos: Juan Luis Camacho Barquero.

Fotógrafo: Ángel Hidalgo.

Primera edición.



















Índice


Prólogo


Poemario Poema Nuestro.
(3 poemas)


Dedicatoria.

América en versos.

Costa Rica.

Tierra.

Más allá de donde he ido.

Rezo en Talamanca.

Maestro.

Noche de sirenas.

El equilibrio del reparto.

Poema 17.

Poema 18.

Advertencia.

Poemario Fotos a mi pueblo.
(3 poemas)

I parte.

II parte.

III parte.

Poemario Evolución.
(6 poemas.

Evolución.

Nuevo Orden.

Alguien muere.

En la Ciudad de los Pobres.

Dinosaurio.

Filosofía.

Publicaciones.

Premios.

Datos biográficos.

Fotos a los libros.

Citas libro inédito.






Prólogo


El Valle de El General y sus vecindades son tierras de raíces ancestrales, de leyendas luminosas de Sibús y cobrizas de Surás, de pioneros y descendientes con tradiciones asimiladas y propias, y de hombres y mu¬jeres en la forja diaria de sus comunidades con herra¬mientas que prolongan el poder creativo de sus cuer¬pos y sus mentes.
Por eso, el Valle de El General y sus vecindades son tierras de maestros y de creadores y, entre ellos, de maestros escritores. Somos afortunados quienes he-mos tenido la oportunidad de conocer a varios de ellos y sus obras literarias; nos felicitamos por haber com¬partido con otros que ya han desaparecido en el abra¬zo eterno de su valle.
Marcos Valverde es uno de esos maestros y escrito¬res generaleños vivos y con esta obra poética, América en versos, canta precisamente a esa condición de hom¬bre de su tierra cuando se define como "Hijo del Valle Perfecto / el de cerros guardianes / y mares que can¬tan" o cuando nos cuenta que "Aquella esquina re-cuerda mis pasos / que por cientos / los ha visto al do¬blar mi espalda."
Hoy, día de globalizaciones y culturas diversas, quedarse en la pertenencia de fronteras cercanas pa¬recería anacrónico. Valverde prolonga su identidad poética más allá, a Costa Rica y a la América diversa que reúne en sus versos. De la primera canta al "Via¬jero hechizado / en la ensortijada melena / del bos-que" y al "Pétalo que abre / y nunca cierra". Y de la se¬gunda ofrenda pleitesía a su riqueza y variedad en la "Guacamaya que mece las plumas/ en el filo del vien¬to / con retinas saturadas de esencias".
A diferencia de muchos que cantan a su tierra con dolor y amargura como cimiente, Valverde identifica a ésta como "Tierra / grito del padre al hijo / salto im¬postergable a la esperanza." Y sin dudas nos dice ser poeta de esperanzas pues "¡Cuántas flores faltan / por darme su aroma!" Pero va más allá ("de donde ha ido") para decirnos que esa esperanza es solidaria porque "Tengo que llevar aliento / a todos los que me lo han pedido..."
¡Qué bien!, porque ya somos legiones quienes que¬remos rescatar la tierra solidaria de la esperanza... Y este libro, con toda su estética literaria, es para eso, sospechamos.


Óscar Castillo Rojas

Miembro de la Cámara Costarricense del Libro,
quien ha ocupado el cargo de su
Director Ejecutivo desde 1997
















Poemario
Poema Nuestro
(3 poemas)


















Dedicatoria:

A todos los que luchan
en la igualdad del hombro
y de la sonrisa.

































AMÉRICA EN VERSOS
(Fragmento)



Guacamaya que mece las plumas
en el filo del viento
con retinas saturadas de esencias.

Cordón que une los cascajos polares
salpicado de volcanes.

Incas y mayas
pieles rojas y aztecas
que bailan al compás del tambor
en la noche infiltrada de luna.



(Continúa)








Comentario de la contraportada del libro.



Uno de los poemas ganadores del Certamen Brunca 1985 presentados por Marcos Valverde es el titulado Dinosaurio. Este poema tiene una columna vertebral de 4 palabras que son el eje del mismo. Rompió, salió, volvió y lloró. No por casualidad son verbos, ni por casualidad están en pasado; sino que están colocados de tal forma que le dan musicalidad y eje al resto. Cada una de éstas palabras, son vértebras del poema. Si le hiciera falta una de ellas, se desequilibraría perdiendo la unidad y estructura lograda. El uso de estos cuatro verbos es por elaboración premeditada.
Su título, que es la cara del poema, juega un papel muy importante ya que es el que le da tema. No es un título por título sino que está técnicamente colocado.
La profundidad del tema es tal que abarca de principio a fin la historia y satura la naturaleza del hombre junto con su imaginación.
Casi no usa adjetivos, sin embargo da la imagen exacta de lo que quiso decir. Además de que su mensaje es irónico y crítico a pesar de ser un poema de escasos versos.
Sorprende la imaginación del autor, además su originalidad es admirable. Sus imágenes jamás llegan a ser exageradas, rimbombantes, grandilocuentes y mucho menos laberínticas. Todo lo contrario, luce una sencillez que recuerda a Li Po o a Whitman, logrando una belleza sin recurrir a complicaciones innecesarias.




Lic. José Luis Díaz Naranjo




*Comentario publicado en la revista literaria Chirripó número 3 de febrero-marzo de 1986.

0 comentarios:

Publicar un comentario